sábado, enero 15, 2005

Cada vez más...

Después de todo el caos psicológico que hubo anoche, llegó Liz... hablamos y me di cuenta que ella es la mujer de mi vida. Esto que digo es en serio... tan en serio como un juramento en nombre de la mamá de uno o del Creador... No sé cómo pasa esto, que necesitas la presencia de esa persona a la que amas de verdad, y la necesitas tanto, que olvidas cualquier pasado, y sólo piensas en el momento y lo que sigue después del momento... Así pasó anoche, mientras hablaba con Ella, con mi adorada Elizabeth...

La cosa es cierta... pude haberme enamorado mecánicamente de otras personas, pero lo de ella surgió como la cascada en las montañas o como el flujo del fuego de un volcán... es increíble a lo que puede llegar la raza humana, si se me permite comparar... así como podemos destruirnos el uno al otro, podemos también amar de esa forma... amar tanto que olvidamos el orgullo, ponemos las armas abajo y respiramos paraíso por todos lados...

Ojalá a quienes se odian, y a quienes odiamos, este escrito nos inspire, para recordar porqué amamos y porqué nos debemos olvidar del odio, que es el sentimiento más estúpido (por algo es el malo, ¿no?), y que hay que recordar que más allá de los problemas del mundo, existe ALGO que nos inspira a seguir más arriba, a llegar al Cielo donde todos tenemos derecho a estar...

No siendo más, Cuídense!!!!!!